En anterior entrada mencionaba yo un concierto de Los Modos que iba a celebrarse en la Sala Zeta el 2011-02-11, fecha muy aparente en razón de su palindromicidad parcial. Tocábamos con un grupo de Barcelona, Los Eléctricos, a quienes recomiendo a todos Vdes. encarecidamente. Una bajista excelente, un guitarra sensacional, todo contención a pesar de su inmenso virtuosismo (además de notabilísimo compositor), un batería poderoso y un cantante de esos delgados-con-mucha-personalidad. Me encantaron. Me encantó el concierto, en general, el nuestro y el suyo, salvo por un par de detalles menores: el público fueron OCHO personas y nuestro fee ascendió a... 13.75 EUR. No, no hay error de transcripción.
Con Vdes., mi nueva Gibson ES339 antique red. No digan que no es preciosa. Suena de miedo, es de una belleza insultante destelleando bajo los focos y feedbackea como debe hacer toda guitarra de bien. Gocé a modo con y de ella sobre el escenario, qué demonios. Dado que la organización puso a un fotógrafo profesional a hacer pictogramas de qualité, estoy casi seguro de que podré colgar algún retrato de esos, donde se evidencie la realidad de mi aserto.
Y bueno; la noche del miércoles fue una especie de oasis en medio de una semana de trabajo desmesurado de ése que le ocupa a uno mañana, tarde y noche (aunque le dé a uno tiempo de escaparse un par de horitas para hacer el ya citado concierto: soy un prodigio de organización). Inmediatamente antes y con ocasión del puente imposible ése que se han inventado para poder remachar la excelencia del trabajo en una España al borde del 25% de desempleo (un saludo al Sr. Chapuzapatero), gocé de un breve viaje a Burdeos, donde pude ponerme púho de ricos caldos.
Salí de aquí un viernes a mediodía, llegué como a las 22.00 directamente a cenar y al día siguiente, a las 10.30, estaba en la primera cata. Y así hasta el lunes: después de rematar el enogastronómico viaje mediante un almuerzo glorioso en el Maher de Cintruénigo (señaladísimo restaurante que no deberán obviar Vdes. si se aventuran en un paseo por esa parte de Navarra) llegué al hogar (acarreando, eso si, un kilo de más que he de liberar).
Con estos antecedentes tan estresantes, comprenderán Vdes. que cuando MBO sugirió hacer en la mañana del sábado un sosegante pic-nic en la campagne yo no me pudiera oponer. Claro, uno tiene sus límites; cuando supe que se trataba de un bic-nic, indiqué que muy bien todo, pero que yo iba de vehículo de asistencia. Vehículo automóvil de asistencia, quiero decir. Como resulta que había invitadas otra quincena de personas y había que acarrear mantas, alimentos, bebidas y toda suerte de implementos necesarios para organizar el evento, la idea no era mala. Y allí que me he ido, cargando hasta arriba el gran apero rodante (Dios me ha iluminado: si no, mi pobre Porsche hubiese devenido barchetta, y nunca mejor dicho). En fin, seamos sintéticos: PICNIC de sábado: uno llega, extiende manteles, come cosas (ricas) hechas en comandita, se rie, bebe un poco de vino, otro poco de cerveza, una cocacola, entonces se pone a caer el cielo, se recoge todo a toda hostia (incluyendo la basura), se traslada como puede a un bar y se bebe un carajillo. Curioso, sips. En bici es un poco más incómodo, la verdad... Mi libro de 2º de EGB que explicaba cómo eran los pic-nics en bici precisaba lo de la tortilla de patata y lo de la guitarra (en efecto, me he llevado una acústica, todo bucólico y juglaresco yo), pero no lo del tormentón terrorífico. Nada que no haya podido resolver luego en casita, tras de adecuada duchita, un gin tonic de Fever Tree y London Gin.
Como ven, la vida sigue más o menos igual, abstracción hecha de la progresión aritmética de los efectos de la adolescencia (eterna) del joven UPMM, que cuenta ya con diecinueve años y está mucho más intragable que cuando tenía quince. La permanencia teen de J. es tan la leche (por no decir algo peor) que casi puede conmigo.
De entre mis lecturas, magro placer de una vida un tanto atropellada, no me atrevería a recomendar gran cosa. Supongo que el sensacional último VARGAS LLOSA, El sueño del celta, pero eso es algo tan antiguo como obvio (no dejen de leerla). Cosa menor y navegativa, La ronda del pirata, una obrita tipo O'Brian cuyo autor, James L. NELSON fue muy ponderado por aquél. La carga de mastelero de juanete mayor, noray y cabrestante en el texto es ligera: no es menester pues, tan apenas, estar todo el rato tirando de diccionario de náutica para poder leerlo.
Un par de panfletillos de filosofía política, La insurrección que viene (debida a un supuesto Comité invisible) e Indignaos (Stéphane HESSEL, con prologo-monserga del pelmazo de SAMPEDRO) me han valido para constatar que el pensamiento progresista (o de ultraizquierda, por qué no decirlo: de entre los dos textos, aquél revindica la excelencia del comunismo, con dos cojones) sigue estando igual de apolillado a pesar de la peste a naftalina que desprende. No lamento haberlos leido y tenerlos. Nada nuevo bajo el sol.
Aquí vendría que ni pintiparado un comentario acerca de la situación política de la Patria, pero estoy tan harto del Zapatos y sus inútiles adláteres; de la posibilidad de que se repita la experiencia tripartitaria en Aragón y en Zaragotham, si bien esta vez los sozis se ajuntarán con los comunistas cachiruleros en lugar de con los comunistas barretineros (además de con los comunistas sin prenda de cabeza regional específica); de la vergüenza del Camps y sobre todo del záforas ése castellonense y aeroportuario cuya mera existencia exige cárcel a gritos tras de esas gafas de sol... estoy tan harto, en definitiva, que prefiero pasar para no contagiarles a Vdes. mi hastío.
Y bueno, una nueva obra de una vieja conocida que, definitivamente, no ha sido llamada por el camino de la narrativa comme il faut más allá de Petra Delicado. Me refiero a Alicia GIMÉNEZ BARTLETT, que se despacha con una Donde nadie te encuentre perfectamente prescindible, en la cual, además, se refiere a Beceite -provincia de Teruel-, como Beseit. Escribiendo, naturalmente, en español. Esas cosas, como es bien sabido me ponen malo, pero ciertamente no crujiría tan severamente la obra por semejante tontada. El problema es que la aventura es completamente inverosímil, los personajes más falsos que Judas y más previsibles que El Gran Wyoming, los diálogos -numerosos- completamente fuera de contexto lógico y cronológico (idénticas las hablas de un periodista barcelonés y de de un campesino turolense, por ejemplo), y demasiada moralina subyacente, muy memoria histórica, aunque menos cargada hacia la progresia. Vamos, que no se me tomen la molestia de conseguirla ni leerla.
Y dicho esto, me retiro a descansar: ya he calzado una entrada verborrágica en condiciones y me lo merezco. Creo.
6 comentarios:
Y yo que me alegro de leerle, :-D
Mks.
Urghs, menos mal que escribes, Awake. Esta sequía comentatoria no me estaba gustando nada. Besos ;-D
para mi también ha sido un placer descubrir que todavía tienes algo que contarnos ( interesante como siempre). Muchas gracias
Hans, su respuesta al primer comentario es de la 06:25 am
A ver si con el estrés y el escuatro de su operacion corporativa de los cultivadores de plantas de jardín se nos va a echar a perder.
Duerma, duerma. Y cuidase, que hay una comida Vieja Guardia por ahí pendiente por Ud. sugerida y por mi aplaudida.
¡Albricias, Hans! Por fin asomas la testa :)
Preciosa la curvilínea, felicidades por la adquisición.
Por otra parte, doy fe de las bondades culinarias del Maher, en el que sólo he estado una vez, pero al que siempre prometí volver. Aunque hasta Cintruénigo sólo hay un paseo, también puede ser interesante alojarse en La Casa de mi Abuela http://lacasademiabuela.e.telefonica.net/, establecimiento con encanto regentado por una buena amiga.
Ojiplática me ha dejado saber que tienes un Porsche, supongo que 911...
Y en cuanto a las letras... ando por otros derroteros y no he leído ninguna de esas novelas. Aún así se echa de menos más cantidad de post por tu parte que, indudablemente, también son más calidad.
Un saludo y no dejes morir el bló.
LATERAL ZURDO, gracias por su comment. A ver si se prodiga V. también.
MS, que llevo mu' mala vida, como bien sabes...
MARTINA, es un Boxster S en realidad: la condición de destechumbrizable es importante para mí (hay alguna foto por ahí en el bló, si no recuerdo mal). La guitarra, además de preciosa, suena de muerte :D
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